Tal vez todas las vidas se entretejen porque la naturaleza es un código incomprensible, caótico y absoluto cuya única alterabilidad es el error. Y tal vez habitemos un ecosistema matemático, y este cuerpo sea una especie de avatar, y nuestro genoma un algoritmo. Y mis átomos y los tuyos, como píxeles de una imagen, no sean nuestros, y algún día se separarán para dar lugar a otras imágenes, a otras historias. Y tú y yo, que hemos venido desde tan lejos, que hemos atravesado el cosmos para acabar justo aquí, nos disolveremos, poco a poco, en la eternidad de la que ya somos parte...